La tecnología nos ofrece bastantes ventajas, sin embargo, aunque no lo tengamos muy en mente, son agentes contaminantes. Por ejemplo, tu bandeja de entrada, o la plataforma de streaming donde ves tu serie favorita, y las videollamadas, contaminan, incluso las bitcoins, consumen más electricidad que Noruega o Ucrania.
Esas juntas en Zoom o en otra plataforma de streaming, de aproximadamente una hora, emite de 150 a 1000 gramos de dióxido de carbono, lo que requiere de 2 a 12 litros de agua y exige un área de tierra que suma aproximadamente el tamaño de un iPad Mini.
¿Cómo podemos reducir nuestro impacto? De acuerdo con datos de Purdue University, MIT, Yale y University of Maryland, al dejar la cámara apagada durante una llamada web puede reducir estas huellas en un 96%. o puedes cambiar a una plataforma como Crewdle, que promete ofrecer videollamadas más verdes.
Funciona al conectar a los participantes directamente —una red peer-to-peer—, es decir, elimina la necesidad de servidores y permite que la llamada viaje la menor distancia posible y gaste la menor cantidad de energía.
Crewdle ganó el reconocimiento Golden Kitty Awards en la categoría impacto social. Además es totalmente gratis.